Aquí les dejo los textos con los que revisaremos algunos contenidos de la asignatura, a modo de diagnóstico...
Por ahora, las dos actividades que guié en el aula son para el próximo martes 22/03...Ahí los espero...
Advierten que el mal uso de los videojuegos puede ser perjudicial
Los chicos que pasan muchas horas frente a las máquinas podrían verse afectados. También alertan sobre los contenidos. La mayoría de los juegos apela a la violencia y la agresividad. Y pueden generar adicción.
Es uno de los hobbies que más interés despiertan entre los niños y adolescentes de hoy, en todos los sectores sociales. Con consolas propias o alquiladas por el fin de semana o en computadoras personales o de cybercafés, los videojuegos seducen y fanatizan a chicos de todas las edades. Hasta ahí, una tendencia de época que avanza de la mano de la informatización. Pero hay dos temas que preocupan a quienes estudian el fenómeno: la cantidad de horas que los niños esfuman a diario en esos mundos virtuales y, sobre todo, el contenido de algunos de ellos, que en muchos casos promueven la violencia, la discriminación y hasta las adicciones.
El tema afecta a la mayoría de los padres del país. Según un relevamiento de la consultora Markwald, La Madrid & Asociados, siete de cada diez chicos juegan a los videojuegos, porcentaje que supera el 80% en la franja adolescente y en los sectores más altos. Cerca de la mitad lo hace “casi todos los días”, sobre todo en el caso de los varones.
Son nuevas formas de entretenimiento, nada que estigmatizar. Pero tampoco se deben subestimar algunas advertencias, porque esa afición conlleva algunos riesgos asociados con la modalidad de uso y los contenidos del juego. De hecho, un estudio de Amnesty International reveló que más de la mitad de los videojuegos “fomentan el abuso de los derechos humanos”[…]. Fuente: Clarín, 17/7/2007 (fragmento)
Una absolución para los videojuegos
Un estudio niega que inciten a la violencia: un noticiero televisivo tiene mayor impacto emocional.
El debate sobre la legitimidad de los juegos electrónicos fue radicalizándose cada vez más. De un lado están los que desearían prohibirlos o limitar su difusión, del otro, los que los defienden y sostienen que se trata de una forma más de entretenimiento.
Lo que está en discusión es la presunta influencia negativa que este medio tendría sobre los adolescentes y los niños. Aunque conviene aclarar que la edad media de los jugadores aumentó sensiblemente.
Esto no significa que sobre ellos, al igual que sobre los chicos, los juegos no tengan un poder o una influencia negativa. El problema es que no hay estudios atendibles capaces de demostrarlo o de negarlo.
Aclaremos, estudios de este tipo hay docenas, pero en su mayoría están fuertemente condicionados por prejuicios. Por lo menos eso afirma Christopher J. Ferguson, investigador del departamento de Ciencias Aplicadas de la Universidad Internacional de Texas. Una reciente publicación suya muestra que muchas de estas investigaciones tienen muy poco de científico.
Algunas fueron realizadas […] preguntando explícitamente a los sujetos qué sentían después de haber jugado durante 20 minutos con un videojuego violento. Un método poco eficaz.
“El problema está mal planteado”, confirma Francesco Antinucci, director de la sección Procesos Cognitivos y Nuevas Tecnologías del Consejo de Investigaciones Científicas de Italia. “Es verdad que la interacción de los videojuegos implica una participación mayor que el cine o la televisión. Pero el impacto emotivo es idéntico. Muchas veces es incluso menor” […]. Fuente: Clarín, 27/7/2007 (fragmento).